He de deciros que además del trabajo hay otra cosita que me hace FELIZ, una cosita muy muy bonita... Voy a ser mamá!!!! y es que los niños en época de crisis vienen con un trabajo debajo del brazo jijijiji.
Todavía no sé que será, si niño o niña, tengo la sensación que será niño, pero bueno, aunque suene a topicazo me da igual lo que sea, sólo quiero que sea un niñ@ san@.
Bueno y vamos con la receta de hoy, que son unas riquísimas torrijas, son uno de mis dulces favoritos, tanto que formaron parte del postre que se sirvió en mi boda, y claro en la época que estamos no podían faltar.
INGREDIENTES:
Una barra de pan especial para torrijas.
Un litro y medio de leche (en mi caso desnatada sin lactosa)
Cuatro cucharadas soperas de azúcar
Una ramita de canela
La piel de una naranja y la de un limón ( la parte coloreada, nada de blanco, que amarga)
Una cucharadita de extracto puro de vainilla
Huevo batido.
Aceite de oliva virgen extra, lo suficiente para freir.
Azúcar con canela en polvo para rebozar las torrijas.
ELABORACIÓN
Hervir la leche con la ramita de canela, la piel de naranja y la piel de limón. Cuando hierva apagar el fuego y añadir el extracto de vainilla, las cuatro cucharadas de azúcar remover bien para que se disuelva el azúcar y tapar para que infusione. Mientras cortar el pan en rebanadas, a mi me gustan gorditas y de forma oblicua.
Poner las rebanadas de pan en una fuente y mojar con la leche caliente, yo las dejo reposar en el frigorífico unas horitas, para que se empapen bien.
En una sartén poner el aceite de oliva virgen extra a calentar, yo pongo la piel de una naranja dentro así sé cuando está a la temperatura adecuada y además toma un delicioso sabor. Pasar las rebanadas de pan por el huevo batido y freir, dar la vuelta cuando estén con un bonito color dorado y dejar dorar por el otro lado, sacar a una fuente con papel absorvente, después rebozar en el azúcar con canela por todos los lados.
Es muy importante mantener el aceite limpio para que todas las torrijas nos salgan bonitas, hay que ir quitando la hebritas de huevo que se van formando e ir jugando con la temperatura para evitar que se nos queme el aceite. Me gusta usar aceite de oliva virgen extra para freir, es el mejor ya que resiste hasta ocho frituras sin perder sus propiedades, siempre y cuando no lo quememos, hay que evitar que humee, además es el único que forma una película alrededor del alimento que se esté friendo en él ,evitando así que nuestros platos queden grasientos.
Espero que os gusten las torrijas tanto como a mi, gracias por leer el blog, besos mil y hasta el próximo post!!!
